Esta certificación nos permite asegurar permanentemente que nuestros productos enológicos son saludables y seguros para su uso en el sector de la alimentación. Nos autoriza también a opinar interna y externamente sobre cuestiones relacionadas con la seguridad alimentaria.
En el marco de nuestra gestión sobre seguridad alimentaria (APPCC), analizamos y controlamos los riesgos biológicos, químicos, físicos y alergénicos en el conjunto del sector enológico: desde la recepción de las materias primas y los envases hasta los productos fabricados.
Paralelamente, y en el mismo marco de la seguridad alimentaria, otros recientes acontecimientos importantes han sido la revisión completa del APPCC y la toma en consideración del reglamento europeo REACH.
Como avaladores de la trazabilidad y la conformidad de los productos enológicos fabricados, realizamos controles sistemáticos a lo largo de toda la cadena de producción, siguiendo unos procedimientos definidos.
LA CALIDAD, NATURALMENTE.
Esta gestión global de la Calidad también tiene en cuenta las exigencias medioambientales, especialmente a nivel de los envases, así como las exigencias de seguridad alimentaria impuestas por el sistema internacional (ISO 22000) o para la gran distribución (BRC e IFS).